El mundo del revés

Me dijeron que en el reino del revés nada el pajaro y vuela pez
que los gatos no maullan y dicen yes xq estudian mucho ingles... forma parte de una canción infantil compuesta e interpretada por María Elena Walsh .
De niña la escuché muchas veces y me encantaba, por que al oirla imaginaba al bebé con bigote del que hablaba y las personas caminando con las manos en vez de los pies.
Hoy llegó a mi memoria porque siento que mi mundo se parece, cada día un poco mas al mundo de Walsh ¿será que ella también sentía lo que yo?
Ese vacío imperceptible para los demás, ese que se forma en cuanto las personas notan que no soy lo que mi rostro dice de mi... mis rasgos comunes, mi fisonomía tan habitual esconden una personalidad fuerte, decidida, arriesgada , pero por sobre todo honesta.
Decir la verdad, vivir la vida con gusto, hacer todo lo que se te venga en gana hacer parece ser un pecado mortal en nuestra sociedad.
Ya no es bueno decir la verdad, ser transparente ni real, lo indicado es mentir, ocultar y esconder... cualquier indicio de satisfacer deseos, de actuar solo por el gusto de hacerlo, de salirse de los parametros establecidos por personajes añejos, putrefactos hace años en sus respectivos cajones es pecado capital.
Hay quien dijo por ahí que esas personas te miran feo porque haces lo que ellos jamás serán capaces de hacer... quizás sea cierto.
Yo estoy tranquila, mi alma satisfecha se jacta de hacer y haber hecho todo lo que el corazon y el cuerpo le ha pedido, puedo morirme mañana y no hay quien pueda decir que no hice todo lo que desee hacer, ni que me faltó mucho por vivir, porque aunque sé que aún existen muchas cosas que probar, que experimentar, que disfrutar y que detestar, estoy segura de que en mi vida he vivido mas que muchos en el doble de tiempo.
Soy feliz y me considero una mujer integra, capaz de amar sin limitaciones, de entregarme por entero, amiga hasta las ultimas consecuencias y amante madre de mi hija. Porque así como pongo la cara apara dar , también la pongo para recibir, porque nada en este mundo me duele mas que causar daño a los demás, porque mi corazón está lleno de amor... y aun me queda mucho por dar y recibir.
Continuaré disfrutando de aquella canción, viendo como las cosas por mi lado pasan al revés, porque sigo por el camino correcto y sé que no soy la única... Si Walsh pudo cantar a los niños con su mundo al revés, perfectamente puedo seguir mi vida yo también.